Es el proceso de eliminar componentes polares de un fluido (gas o líquido). También se denomina “purificación” y más comúnmente se conoce como “secado”. El desecante es el medio utilizado para capturar las moléculas de agua. Cuando un fluido “húmedo” pasa sobre el desecante, la molécula de agua es atraída y capturada por el desecante. Después de saturarse, para que pueda reutilizarse, debe reactivarse. Este proceso también se conoce como regeneración. La reactivación o regeneración es el proceso de expulsar las moléculas de agua adsorbidas del desecante. Esto restaura la capacidad de adsorción del desecante.